Como comunidad educativa, ofrece todos los medios pedagógicos de formación humana, intelectual y espiritual, que toda auténtica formación educativa está llamada a desarrollar.
Recibimos una formación personalizada, aprendemos a tener a Jesús presente en todos los aspectos de nuestra vida, nos enriquecemos con todo lo que aportan nuestros compañeros, cada momento del día es importante y lo aprovechamos al máximo, y sobre todo, recibimos la ayuda necesaria para poder discernir qué quiere Dios de nosotros.